Tom Peters, uno de los grandes expertos en management, estudió las características que compartían los equipos de alto rendimiento, y elaboró una lista de cinco cualidades que debe reunir un equipo exitoso. Estas características son: comunicación, coordinación, complementariedad, confianza y compromiso. A continuación, explico en qué consiste cada una de ellas:
1. Complementariedad. Se basa en que la formación y experiencia de cada miembro, tanto a nivel personal como profesional, enriquece los resultados del trabajo en común. Es fundamental conocer bien a los miembros del equipo y saber cuáles son las habilidades y capacidades que pueden aportar. Esto debemos tenerlo en cuenta en los programas de formación y desarrollo.
2. Comunicación. Todos los miembros del grupo deben contar con toda la información necesaria para ejecutar su trabajo. Además, la comunicación es fundamental para que exista una buena relación entre los miembros del equipo.
3. Coordinación. Una coordinación correcta del equipo garantiza que el trabajo salga adelante. Aquí el liderazgo es clave. La coordinación pasa por definir puestos y tareas, gestionar tiempos, hacer seguimiento y proporcionar feedback.
4. Confianza. Es un valor esencial para el funcionamiento del equipo. Si no existe confianza entre las personas, se producirá un impacto en las relaciones, en los resultados y en la proyección a largo plazo.
5. Compromiso. El compromiso es una consecuencia de las anteriores y fomenta el sentido de pertenencia y la motivación con el objetivo común.
La potenciación de estas 5 características en los equipos tiene grandes beneficios. Entre ellos, los siguientes:
· Aumento de la motivación y compromiso de los colaboradores
· Mejora en la calidad del trabajo y los resultados
· Reducción de conflictos y absentismo
· Mejora en el aprendizaje y el intercambio de información
Que un equipo funcione es responsabilidad de todos sus integrantes, pero, sobre todo, es responsabilidad del líder fomentar y potenciar estas características. He estado muchos años trabajando con líderes y equipos y, sin duda, aquellos que realmente creen en esta forma de trabajar son los que consiguen mejores resultados, donde las personas se sienten más satisfechas y se produce un mayor desarrollo profesional.